Las emociones son muy importantes para las personas. Están muy presentes en las distintas actividades que realizamos y tienen mucho que ver en la felicidad diaria.
Una de las emociones que más puede afectarnos es la Ira. Se trata de una emoción decisiva para la supervivencia, ya que nos activa y defiende en situaciones de peligro.
Sin embargo, como otras emociones negativas, puede darse en momentos que no suponga un peligro real, o puede escapar a nuestro control, con lo que puede convertirse en un problema para la convivencia con nuestros semejantes.
Muchas personas e inclusivo niños tienen problemas con esta emoción negativa. Se trata de que tienen poco auto control que ante situaciones sin importancia reaccionan con agresividad.
Las personas que a medida van creciendo tienen que desenvolverse en contextos que les piden mayores habilidades de relación y de convivencia. Una habilidad esencial es la de auto controlarse en momentos de frustración o de conflicto con sus iguales.
Qué podemos hacer para enseñar a controlar la ira y convertirla en una emoción que en vez de perjudicarnos lleve a enfrentar los conflictos de manera positiva y fructífera.?
1- tomar conciencia de la emoción de la ira:
enfadado o alegre, rabia, cómo cambia su cuerpo con el enfado, qué pensamientos le vienen a la cabeza en esos momentos, etc.
2- distraer los pensamientos de rabia o ira: por ejem, fijándose en otras cosas, contando mentalmente de dos en dos, etc.
3- parar o detener el pensamiento de rabia o enojo
Para ello imaginar una escena o situación en la que sienta mucha ira y a parar de pensar cuando le gritemos ¡No¡ o ¡Basta¡
4- visualizar la situación de una manera positiva:
imaginarse respondiendo de una manera tranquila a una situación que le provoca enfado.
5- darse auto instrucciones positivas:
decirse a sí mismo frases que le tranquilicen, como: “Bueno, esto no es para tanto”, “Es mejor estar tranquilo en vez de gritar”, “soy capaz de hablar sin tener que llegar a las manos”, etc.
6- Entrenamiento en asertividad:
Hay que responder de manera positiva y auto controlada en lugar de hacerlo de forma airada. Para ello se pueden hacer ejercicios de role playing en los que se entrenan escenas de responder de manera tranquila y sin enfadarse, etc.