Decídete, “te quedas o te vas”




Todas las relaciones de parejas tienen sus altas y bajas e indudablemente es un constante crecimiento. Las relaciones de pareja son una parte importante de nuestra vida. Una relación de pareja debe estar conformada por dos personas con metas, sueños, ideas, valores, respeto, amor, deseos de superación. Sin embargo el mismo crecimiento de cada uno se va forjando en diferente tiempo. A veces uno crece más rápido que el otro y es cuando existen las diferencias. Existen varios factores para consolidar una pareja pero también existen variaciones que hace que una relación no dure. Como la economía, los hijos, el aburrimiento, los triángulos amorosos, la violencia doméstica, la falta de respeto, no tener amor propio, apatía, ser deshonesto, mentiras, falta de valores, intervención de la familia de origen, religión, falta de compromiso, entre otros.

Toda pareja tiene crisis y hasta cierto punto esta crisis de pareja es una situación normal. Generalmente aparece cuando dentro de la relación se han tenido varios desaciertos y no se han dado soluciones para los mismos, arrastrando problemas añejos sin resolverlos y sin llegar a un acuerdo para mejorarlos. Sin embargo una vez identificada la crisis, lo más importante es sortear de una manera positiva los conflictos que llevan a ella, dando paso a reconocer el momento en que una relación ha terminado o debe continuar, ya que esto es crucial para nuestra salud física y mental.

Porque finalmente siempre habrá parejas con problemas económicos, hijos de por medio, la vida constantemente cambiando, así como las presiones sociales por mencionar algunos. Lo que nunca cambiará, no importando nacionalidad, raza o estatus social, son los valores, el amor a la pareja, respeto, confianza, superación y autoestima. Así que ponemos estos puntos en consideración para reflexionar acerca de Decídete, “te quedas o te vas”.

- Realiza un balance de tu relación: es una relación que te lleva más al crecimiento o a la pérdida de tu esencia personal.

- Escucha atentamente tus sentimientos: los sentimientos son el mejor termómetro para evaluar una relación de pareja, las crisis en la pareja y los motivos de estar juntos.

- Sí no sabes qué decidir: busca ayuda siempre existe un profesional que te puede ofrecer ayuda en estas circunstancias. La terapia de pareja es una gran posibilidad de aprendizaje y crecimiento.

- Evita volver a discutir los mismos problemas todo el tiempo: los problemas tienen que centrarse en la solución y no en las discusiones, eso no te ha llevado a encontrar una mejor forma de relacionarte con tu pareja, ni a superar las crisis en tu relación.

- Reconoce los límites de tu relación y de lo que le puedes ofrecer a tu pareja y lo que le demandas todo el tiempo: ni tú, ni tú pareja van a cambiar si no cambian su enfoque de solución de conflictos y crisis.

- Centra tu atención en las causas: las parejas tienen crisis y discuten por temas que no son las causas sino los efectos de sus discusiones.

-Lo que más te molesta de tu pareja es lo que a ti no te gusta de ti y es tu propio reflejo; así como lo que tienes que enfrentar, tomar, abrazar, dejar ir y perdonar. La relación de pareja conflictiva muestra lo que traemos como recuerdo de nuestros propios miedos o sombras del pasado que acarreamos desde nuestros padres o familia de origen.

-Cálmate, respira profundo, sonríe, recuerda los buenos momentos que has vivido con tu pareja, distrae tu mente con tu pasatiempo favorito, aléjate por un instante y dedícate únicamente a escuchar la voz de tu interior, la voz más sensata y racional dentro de ti y sobre todo valórate como ser humano.

Si finalmente piensas terminar con tu relación amorosa, debe ser motivo para un crecimiento y recordar que no importa cuántas relaciones de pareja tengas. Si no has aprendido amarte a ti mismo y respetarte todo seguirá igual. Cuando tomas una decisión ya sea de quedarte o irte la vida o el universo te pondrá situaciones positivas para poder salir adelante. Lo importante es tomar el compromiso de amarte, amar lo que hay a tu alrededor, dar lo mejor de ti que finalmente solo se vive una vez. Y los hijos si los hay, solo están por un momento y la pareja es la que queda a lo largo de los años así que hay mucho que descubrir y conocer. Cuando se está en un caos no hay poder humano que escuche una solución, pero detrás de una gran tormenta viene la calma y muchas veces necesitamos de las tormentas para poder florecer y pasar al siguiente nivel.

Si decides quedarte en la relación es buena época para hacer un cambio. Hacer cosas nuevas, nuevos compromisos, permitirse tener errores, hablar de las cosas que se quieren cambiar, de lo que nos gusta del uno y del otro, buscar y crear nuevas oportunidades de mejoramiento en la relación, platicar de cuáles son tus sueños, cuales son las metas de pareja, hacia donde dirigirse y como lograrlo. Finalmente estas en una empresa que debes cuidar e invertir tiempo, dinero, amor, pasiones, hijos, sueños, metas, organizar y estructurar la relación mutua y horarios. Pero también hacer cosas fuera de lo planeado es saludable para tu vida de pareja. Y si estas pasando por un momento de crisis de pareja no te preguntes “porque me está pasando esto”, sino “para qué” se está presentando esta situación y como persona “qué es lo que debo de descubrir o cambiar”.
                                            

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